Este artículo aborda el dolor profundo que implica la pérdida de un hijo desde una perspectiva tanatológica y emocional. Explora el impacto del duelo, valida las emociones que surgen en el proceso y ofrece tres herramientas para afrontarlo: rituales de despedida, escritura terapéutica y acompañamiento en comunidad. A través de estas estrategias, se busca brindar apoyo, comprensión y una luz de esperanza en el camino hacia la reconstrucción emocional.